miércoles, 9 de enero de 2013

SABES A LLUVIA

Podría ser una gota de lluvia

o tus zapatos rojos.

Algo tan simple como una gota de lluvia que cae

sobre tus zapatos rojos y despierta

otro rojo

más encarnado e insultante

que recuerda el error de haber elegido esta mañana

las bailarinas de aire francés que tanto te gustan.

Los zapatos que precipitan todas las miradas del mundo

sobre ellos. Los cósmicos zapatos que invisibilizan

el resto de Lola.

Lola y la triste figura de su cuerpo desnudo

frente al espejo.

El desastre de Lola descascarillándose por días.

Abrazando la ruina.

Lola buscando ropa de superhéroe en el armario

La ropa que tapa, oculta y disfraza; ansía

expectativas imposibles, desvela añoranzas;

reinventa mujeres raras.

Transparenta.

Lola sideral, fugaz como una estrella atraviesa hoy Madrid

dejando el rastro de sus rojos zapatos bajo la lluvia.

Y todo Madrid huele hoy a Lola

pisando descalza los charcos

con sus francesitas de aire vintage al fin encarnadas,

colgando de las orejas.